Tener un rostro redondo puede ser causa de mucha frustración. Algunas personas con el rostro redondo pueden tener dificultades para encontrar las técnicas de maquillaje adecuadas que les ayuden a destacar sus rasgos faciales. Afortunadamente, hay una técnica común en el mundo del maquillaje que puede ayudar con esto: el contorno. Con un poco de práctica y algunos consejos de expertos, puedes superar este reto de maquillaje y mejorar la estructura de tu rostro para que tus rasgos estén más definidos y sean más visibles.
¿Qué es el contorneado?
El contorneado es una técnica de maquillaje que utiliza diferentes tonos para crear una ilusión de luz y sombra en cualquier parte del rostro. El principio principal del contorneado es añadir profundidad y dimensión al rostro, hacer que destaquen ciertos rasgos o suavizar algunas imperfecciones. Para una forma de rostro redonda, el objetivo es crear la ilusión de más definición y menos redondez. Esto se consigue utilizando tonos más oscuros para crear la apariencia de sombra en las zonas que hay que adelgazar, y tonos más claros para añadir luminosidad y crear la apariencia de zonas levantadas.
Elige los productos adecuados
El primer paso para conseguir un contorno con éxito es elegir los productos adecuados. Necesitarás dos polvos contorneadores de tono diferente: uno un poco más oscuro que tu base y otro un poco más claro. También elige un tono que sirva de iluminador, unos polvos fijadores y un bronceador. Siempre es mejor empezar con un producto en polvo, ya que es más fácil de trabajar y da mejores resultados de mezcla.
Elige las herramientas adecuadas
Un factor importante para el éxito del contouring es utilizar las herramientas adecuadas. Necesitarás una brocha de mezcla mullida para el tono de contorno más oscuro, una brocha más pequeña o una esponja para el tono de contorno más claro y una brocha abanico para iluminar. Una esponja de mezcla también puede ser útil para mezclar el producto y crear un acabado más natural.
Aplica el contorno
Una vez que hayas seleccionado el tono correcto del contorno y las herramientas adecuadas, es hora de empezar la aplicación. Empieza aplicando una línea del tono de contorno más oscuro en las sienes y el nacimiento del pelo, para crear un aspecto más alargado. Utiliza la brocha difuminadora mullida para difuminar el producto hacia el interior, hasta la mitad de la frente. Esto ayudará a crear más dimensión y a llamar menos la atención sobre la redondez de la cara.
A continuación, aplica el tono de contorno más oscuro en los huecos de las mejillas. Para encontrarlos, simplemente chupa las mejillas y aplica el producto en las zonas más hundidas. Empieza aplicando una pequeña cantidad de producto y, a continuación, aumenta gradualmente el color. Utiliza la brocha de mezcla en movimientos ascendentes para ayudar a difuminar el producto y suavizar cualquier línea brusca.
Por último, aplica una pequeña cantidad del tono de contorno más oscuro a los lados de la nariz y difumínalo con un pincel pequeño. Esto ayudará a que tu nariz parezca más delgada y definida.
Aplica el iluminador
Después de aplicar el tono de contorno más oscuro, es hora de añadir el iluminador más claro. Utiliza un pincel abanico para aplicar una cantidad generosa del tono de contorno claro en la parte superior de los pómulos, el puente de la nariz, la frente, el arco de Cupido y la barbilla. Esto ayudará a crear la ilusión de un aspecto levantado y a que tus facciones destaquen.
Fija y añade el toque final
Una vez que hayas aplicado el contorno y el iluminador, es importante fijar el maquillaje para que se mantenga en su sitio durante todo el día. Utiliza unos polvos fijadores translúcidos para aplicar un ligero velo por todo el rostro y fijar el producto, creando un aspecto más natural. Por último, aplica una pequeña cantidad de bronceador en las sienes, las mejillas y la línea de la mandíbula para dar un toque de dimensión adicional.
La práctica hace al maestro
Como con cualquier técnica de maquillaje, cuanto más practiques, mejor serás. Practica diferentes técnicas de contorneado y no tengas miedo de experimentar con distintos tonos y herramientas para encontrar el que mejor se adapte a la forma de tu rostro. Con un poco de práctica y algunos consejos de expertos, podrás dominar el arte del contorneado y crear un look impresionante y definido que hará que tus rasgos destaquen.
Así que, ¡diviértete y experimenta! En un abrir y cerrar de ojos, serás una profesional del contouring y podrás crear un look impecable y definido para que tus rasgos destaquen de verdad.